*Jiménez fue distinguido con el Premio Altazor como Mejor Director de Televisión (por la serie “El Reemplazante”, en 2013) y con el Premio Pedro Sienna como Mejor Director de Cine (por “Bonsái”, en 2012). También recibió la Medalla de la Región de Los Ríos, por sus aportes en el campo del arte y la cultura.
En marzo de este año, el cineasta Cristián Jiménez asumió como Director y académico de la Escuela de Creación Audiovisual de la Universidad Austral de Chile. Jiménez es valdiviano, pero tal como contó, se fue de la ciudad siendo adolescente, sin embargo, hay que destacar que muchas de sus películas han sido filmadas en esta región.
¿Qué fue lo que te motivó a ser Director de la carrera?
Me fui de Valdivia siendo adolescente. Estudié sociología. Trabajé 3 años en televisión en Londres. Y cuando me dieron ganas de dirigir, me di cuenta de que quería hacerlo acá. Ese primer corto fue “El Tesoro de los Caracoles”, con el cual abrimos el FICV el año 2004 en el viejo Cervantes. A partir de ese trabajo, cambió radicalmente mi vínculo con la ciudad. Fue como descubrir Valdivia de nuevo. De ese primer retorno, surgieron 3 largometrajes: “Ilusiones Ópticas”, “Bonsái” y “La Voz en Off”. En todas esas películas hay lluvia, humor y ternura, pero también una pregunta por lo verdadero y lo falso, en medio de una ciudad y un país que se moderniza a gran velocidad, alterando a su paso todo lo que se le pone por delante: paisaje, arquitectura, empleos, cuerpos, sueños, recuerdos e incluso lazos familiares.
Si ante la globalización Chile es periferia, Valdivia es periferia de Santiago. O sea, doble periferia. Y en ese juego ocurre algo especial. Como cuando en mapudungún una palabra se repite para enfatizar. Valdivia tiene algo de eso. Un poder que proviene de la repetición. Se podría hacer una película muy valdiviana que se llame justamente “Valdivia Valdivia”, como “Calle Calle” o “New York, New York”. Leer más